Cuando los seres humanos alcanzamos los trece, catorce, quince años
de edad y decidimos practicar deportes.
¿Qué emociones
nos movilizan?
Está comprobado que la práctica deportiva disminuye los niveles de ansiedad y depresión, ya que actúa como un relajante muscular y mental. Así los jóvenes
adquieren un mayor control sobre sus impulsos y mejoran la habilidad para tomar decisiones.
Acerca de la búsqueda de identidad, según Erik Erikson, (Psicoanalista estadounidense, 1902-1994) "...los adolescentes reviven conflictos de las etapas anteriores. La exigencia física y mental del deporte además de ser un distractor, otorga herramientas para la superación de los conflictos...". Aparece el entrenador quien marca las pautas deportivas, fija los objetivos y establece normas para el equipo. Cuando los jóvenes sienten ser una pieza valiosa dentro de un grupo mejora la autoestima.
La actividad deportiva consiste en poner en práctica valores hacia los otros como el respeto por el contrincante y puede ayudar a prevenir o modificar conductas desadaptativas.
Para los que tienen hiperactividad les sirve para quemar energías. Para quienes sufren de comportamientos incompatibles (tendencia a las adicciones, hurtos), seguir pautas grupales requiere la modificación de los mismos.
Las artes marciales ayudan a fortalecer la confianza de quienes hayan sufrido situaciones de bullying.
Una paciente de 16 años de edad, a quien atiendo bajo modalidad presencial; se acercó al consultorio, debido a que le cuesta dormir por las noches y le tiembla el cuerpo. Estuvimos trabajando a través de la palabra, con el correr de las sesiones, de qué modo ir reduciendo su nivel de ansiedad y depresión. Le sugerí un deporte como gimnasia con aparatos, artística o patín, eso le permitiría canalizar sus energías de manera saludable.
Otro paciente, un joven de 15 años de edad, a quien atiendo bajo modalidad virtual, refiere tener conflictos con su madre por motivos que él cree no son tales. A lo largo de las sesiones fuimos trabajando a través de la palabra, la posibilidad de que realizara un deporte como fútbol, básquet o tenis, con el objetivo de fortalecer su autoestima y adquirir confianza en sí mismo, a la par que mejorará la concentración en las tareas de estudio.
El tratamiento psicológico ayuda a mejorar la convivencia familiar y prepara para una sana adultez.
Viviana N. Cristóbal. Psicóloga. (UBA) M.N.: 61.263.
TE.: 4710-9018 Cel.: 1564813671 Whatsapp: 1169649508.
